En este artículo descubriremos la historia y los secretos de las hermosas plazas que asortijan la enigmática ciudad de Guanajuato.
¿Sabías que la capital tiene más de 15 plazas? A veces con monumentos y esculturas, a veces con templos y casonas. Otras (muchas) ocasiones entrelazadas por los emblemáticos callejones… las plazas capitalinas han sido testigos de su historia. Desde la magnífica e imponente Plaza de la Paz hasta la muy discreta Plaza Mexiamora.
Nuestra ciudad es privilegiada. Los contrastes proporcionados por la arquitectura y sus colores crean entornos únicos, y en ellos existen las plazas. Estos sitios frecuentados por amigos, conocidos, familia, enamorados y solitarios.
El hecho de tener que nombrar una ellas como la más bonita es frustrante e incensario, porque todas tienen su magia y encanto; espacios que amplifican nuestros sentidos al grado de azuzar la creatividad, la inteligencia y las pasiones.
La Plaza San Roque, Plaza San Fernando, Plaza del Ropero, Plaza del Baratillo, Plaza de los Ángeles, Plaza de la Paz y Plaza Meximora son algunos de los regocijantes sitios de nuestra ciudad donde se reúne la gente para pasar un buen momento.
Balcones enmarcados por una serie de luces cálidas, mesas cobijadas por frondosos árboles, cafeterías que impregnan el aroma del grano arábico en cuadras virreinales enteras, adoquines y losas que te conducen a deleitarte con asombrosas perspectivas. Si quieres sentir la verdadera esencia capitalina y descubrir cuáles son los lugares que ocultan (y aportan) el mayor encanto, ¡acompáñanos en esta ruta!
La Plaza San Roque
Aquí es la cuna del Festival Internacional Cervantino. Como característica principal se enaltece el Templo de San Roque, con su particular color rojo colonial. Al centro de la plazuela destaca una gran cruz de cantera flanqueada por retorcidos faroles.
En este mismo sitio podemos encontrar hermosos callejones y fachadas muy fotogénicas, tal es el caso de esta casona con las escaleras al exterior adornadas con macetas preciosas.
Plaza San Fernando
Un lugar con árboles que ya son longevos titanes de la naturaleza. Puedes percibir cómo el agua danza en su fuente florentina. Rodeado de restaurantes y bares, aquí puedes recibir el amanecer, desayunar y tomar un rico café de olla. Ya atardeciendo y anocheciendo, una comida tradicional de la región acompañada de una rica cerveza artesanal.
Plaza del Ropero
Un pequeño lugar con una gran historia. Situada en una esquina, este sitio también cuenta con una fuente de agua. En el linde de la plazuela destaca una escultura a Jorge Negrete, el “Charro Cantor”, quien alguna vez vivió en una de las casonas situadas en dicho lugar. Alrededor podrás encontrar cafeterías, heladerías y también restaurantes.
Plaza del Baratillo
Una de las gemas consentidas de la lista. Esta plaza, además de conllevar su peculiar nombre, tiene un imponente fuente florentina enmarcada por cantera verde tallada. Es muy placentero pasar las mañanas aquí; desde muy temprano ya están instalados los comercios que ofrecen jugos naturales, frutas, pan, chocolate y café caliente.
Plaza de los Ángeles
Esta plaza es la más romántica, pues se coloca como la antesala para el emblemático Callejón del Beso. Edificios coloniales colores pastel circundan este sitio. Aquí encontrarás dulces típicos y heladerías tradicionales.
Plaza de la Paz
Anteriormente se llamaba Plaza Mayor. Aquí destaca la Basílica de Guanajuato, máxima referencia visual de la capital. Maravillosos jardines decoran el lugar; las abejas polinizan y las aves trinan. También se visualiza una gran escultura inaugurada por Porfirio Díaz.
Plaza Meximora
Con la cualidad de la discreción, en este sitio se respira la tranquilidad. Sin duda, esta es una de las plazoletas más coloridas. No hay nada mejor que sentarse en una de sus bancas, escuchar cómo el agua cae de su fuente y apreciar las fachadas de las casas que se encuentran en su alrededor.
