Sí, la ciudad de Guanajuato capital es mágica por su peculiar aspecto urbano, envuelto en un entorno virreynal. Ese que ya es conocido mundialmente: la carectarística Basílica, los túneles y callejones. Sin embargo, hay sitios poco visitados por los turistas e incluso por oriundos.

Nos referimos a los sitios privilegiados por la naturaleza, aquellos en los que si volteas hacia arriba percibes de inmediato el fenómeno botánico de la timidez (donde las copas de los árboles no se tocan), aquellos en los que puedes sentir el viento más puro y los rayos de sol más abrasadores. Aquellos en los que encuentras a los habitantes más cálidos entre montañas frías.

A continuación, presentaremos un recorrido único, por el que conocerás algunas (sí, solo algunas) de las zonas naturales que enriquecen aún más a esta hermosa ciudad que, sin duda, la hacen única. Así que toma tu mochila, casa de acampar, llámale a tus amigos y ¡vámonos!

Cerro de La Bufa

Lo situamos en primer lugar por la cercanía que existe con el centro histórico (una distancia de máximo 10 minutos en auto y unos 30 minutos caminando), claro, depende hasta qué lugar del cerro quieras ir. Lo más recomendable de aquí es llegar hasta la cumbre, que no es nada agotador lograrlo. Si sabes y tienes el equipo para practicar rappel o escalada, hay rutas que son fáciles de ubicar.

Si no sabes escalar o desender pero quieres hacerlo, aquí te dejamos el contacto de dos empresas que te conducen por esta gran experiencia.

Si lo tuyo es más caminar, disfrutar cada paso para oxigenar cuerpo y alma, también es el lugar idóneo. Hay tres cuevas bien ubicadas, en las que puedes entrar y apreciar un amanecer o el atardecer.

Sierra de Santa Rosa

¡Toma tus botas, una cuerda, mucha agua y aliento! Si te gusta ser mujer u hombre de montaña y explorar, existen dos sitios para asombrarte y subir muchas fotos instagrameras. Incluso, con paciencia y respeto, podrás observar venados en Santa Rosa. Este recurso natural tiene espacios incontables y hasta inexplorados. Por lo pronto te compartimos que hay una reserva ejidal que se llama “Las Palomas” (puedes ponerle en Google Maps y llegar). Aquí es donde puedes conseguir ver a los venados mientras acampas.

Aquí hay puedes hacer un fantástico recorrido en bicicleta, disfrutar del viento y el sol mientras subes y bajas pequeñas pendientes. Te pasamos el dato: si te gustaría tener un tour en bicicleta, contacta a esta empresa: Turismo Alternativo.

Presa de Mata, Presa Peralillo y Presa de la Olla

La Presa de la Olla es uno de los muchos iconos de la ciudad. Aquí destaca su peculiar «atalaya» (la torre). Es muy sencillo llegar aquí y, curiosamente, está muy cerca del cerro de La Bufa. En este sitio, de la Olla, puedes disfrutar de un paseo en lancha mientras alimentas a los patos.

Por otro lado, tenemos otras dos presas, (Peralillo y la de Mata). Siendo francos, no es fácil llegar. Incluso para algunos orindos resulta confuso. Lo que aquí recomendamos es que preguntes en el camino conforme vayas avanzando. Y sí, también se requiere camioneta para el camino de terracería (a menos de que no te importe exponer tu coche a algunos golpes con las rocas). Esta experiencia es más direccionada a quienes practican deportes como motocross, cilismo de montaña y la pesca. Pero también puedes pasar un gran día de campo, comer una hamburguesa con una soda bien fría.

Monte de San Nicolás

Hablamos de un pueblito enmarcado por árboles enormes, entre sierras y montañas. Si en el centro de Guanajuato capital pareciera que el tiempo se detuvo, aquí se percibe esa sensación todavía más.