En un evento lleno de sabor y tradición, Huanímaro se destacó como anfitrión de la segunda edición del Festival de Tequila, dejando a los asistentes con un deleite para los sentidos. Con una asistencia de alrededor de 2 mil entusiastas, el festival se consolidó como una experiencia inolvidable.

La Secretaría de Turismo del Estado de Guanajuato, en colaboración con la Dirección de Productos Turísticos, unió fuerzas con Huanímaro y el sector turístico para impulsar la marca de tequila Huaní, producido localmente en el municipio. Además, se promovieron reconocidas marcas como Corralejo y Campotoro, en un esfuerzo por resaltar la diversidad y calidad de los destilados.

El festival no se limitó solo al tequila, ya que también se contó con la participación de artesanos de mezcal, como El Rico, Pasiones del Alma y La Pichecua, quienes deleitaron a los presentes con sus productos únicos. Además, los amantes de la cerveza artesanal disfrutaron de la presencia de Mi Pueblito y Durko, dos exponentes destacados del rubro.

Guanajuato, un estado con una rica tradición en la producción de tequila, cuenta con siete municipios reconocidos con la Denominación de Origen. Abasolo, Manuel Doblado, Cuerámaro, Huanímaro, Pénjamo, Romita y Purísima del Rincón han sido parte fundamental de la historia y la calidad del tequila mexicano.

El festival, en su segunda edición, se enriqueció con la participación de talentosos artesanos locales, quienes mostraron su destreza en el tallado de máscaras de Patol, bordado de listón, creación de artículos de cuero, alfarería y la producción de salsas artesanales, productos herbales y dulces regionales. Estos elementos auténticos agregaron un toque especial a la experiencia del festival.

La gastronomía también fue protagonista, con la participación de talentosas cocineras tradicionales que cautivaron al público con sus sabores exquisitos. Carmen Gonzáles, Ma. Guadalupe Hernández, Beatriz Adriana Camarillo, Julieta Cervantes Núñez, Ana Lilia Blanco, María Arias Segovia, Ma. Lourdes Villalpando Celio y María de Lourdes Camarena Razo dejaron su huella culinaria y demostraron la riqueza gastronómica de la región.

Además, los asistentes, principalmente provenientes de Abasolo, Pénjamo, Irapuato y León, tuvieron la oportunidad de disfrutar y aprender en talleres didácticos de experiencias relacionadas con destilados y la preparación de mixología. Estas actividades interactivas brindaron a los visitantes la oportunidad de sumergirse en el fascinante mundo de los destilados y descubrir nuevas formas de disfrutarlos.